Sunday, July 31, 2005

“La insidiosa fatalidad de las cosas”


Foto JGleeson, Evening Ceremonies, 1986

Leo un libro de Román Revueltas (un músico-controvertible-multifacético-hijo de José Revueltas) titulado “La insidiosa fatalidad de las cosas”.Me ha parecido entretenido e irreverente, con ideas que hacen increíble las insignificancias, eso lo vuelve delicioso.

Les comparto un fragmento:

“Verdaderamente no sé como la gente en general sobrelleva la penosa insignificancia de lo cotidiano, con todas sus dificultades prácticas. La ensoñación, en este sentido, es casi la única herramienta posible para sobrevivir, pero, a su vez, te condena a afrontar el duro trance del reingreso a la atmósfera. Volver a una situación de acrecentada desesperanza es el precio que hay que pagar luego de haber aleteado jubilosamente en las alturas. De la misma manera que luego de consumir la dosis excesiva de Wisky, tequila o vino tinto, la euforia de la víspera se transforma en puro malestar, cada episodio de deliciosa evasión tiene también su correspondiente castigo, que no es otro que el retorno a la implacable realidad de las cosas”.